Ni las palabras alcanzan para despedirte

Ha pasado mucho tiempo –desde 2013– que no volví a escribir por aquí, tuve algunos intentos por continuar expresando mi sentir a través de la palabra, sin embargo no fui constante y desistí.
Estos días han sido de los más terribles, pensar que una de las personas que inspiraba el escribir por aquí, ahora ya no podrá leerme. Me hace sentir fatal, no supe ver las señales y el arrepentimiento de no haber hablado con él duele mucho.

Me he llenado de recuerdos y aún trato de mantenerlos frescos para no olvidarte  Draken Hell (Jaime Sandoval), para tenerte presente.

Te conocí en persona un sábado 5 de julio de 2008, yo tenía 17 años y tu 21. Pero fue a través de la internet donde todo comenzó. En aquel entonces usaba MySpace (una red social donde podías conocer gente de todas partes) y donde se conocía nuevas propuestas musicales.

Él y yo platicábamos por mensajes privados y comentarios en nuestros perfiles, no sé cómo coincidimos en ese mundillo, al parecer teníamos gustos en común pero lo que nos unió fue que él ingresó a una banda de metal donde tocaba la guitarra, se llamaba Hikaro.

Hikaro fue una banda de música, metal progresivo, componían canciones en español y tocaban covers en inglés de bandas como Helloween, Stratovarius, Edguy... El vocalista, Gabriel era mi amigo, el cual conocí en la preparatoria. Mi hermana y yo éramos fans de su música, de ellos y comenzamos una amistad con todos los integrantes de aquella banda.

Asistía a varios ensayos, también vi pasar a varios de ellos, que salían por falta de tiempo o desinterés. Fueron épocas hermosas donde logré entender a personas que tenían mayor edad que yo, que ya estaban estudiando una carrera, incluso algunos ya tenían hijos y esposa. Pero lo que los unía era su fascinación por la música, profesionalizar sus sueños y continuar con el proyecto.
Siempre estaba atenta a cualquier novedad de Hikaro, alguna tocada, una nueva canción, un nuevo integrante. Me emocionaba muchísimo ser parte de algo y convivir con esa otra familia. 
No sé cómo, ni sé porqué razón, pero Draken y yo nos agregamos a MySpace y fue lo mejor que pudo pasar.

Entonces sucedió, yo no sabía que él había entrado a la banda como segundo guitarrista. Empezamos a platicar por MySpace y poco después nos agregamos a MSN Messenger, donde nos conectábamos para platicar por varias horas. Me interesé en él, me sorprendió la forma como platicábamos de temas tan irrelevantes y además, él conocía muchas cosas... me hacía sentir bien.

Recuerdo la vez que le pregunté a qué se dedicaba y él, con tu peculiar forma de escribir me dijo: 

–leo libros–, me quedé pensando un par de segundos ¿qué debía responder con eso?

Sólo pude decir: –claro, yo también leo libros, pero ¿que haces? ¿estudias, trabajas?

Volvió a decirme, –neta, leo libros–, yo sólo escribí: –jajaja, y te pagan por eso o ¿qué?

A lo que respondió: –sí, es algo muy chistoso cada que alguien me pregunta debo explicarme mejor. Sucede que leo libros a médicos que están en operación. Algunos para concentrarse quieren que les lea mientras trabajan y por eso me pagan, es un gran trabajo–

Me quedé sorprendida y pensando –¿cómo rayos consiguió un trabajo tan genial?– aunque no se lo comenté en esa ocasión.

No recuerdo cómo me dijo que tocaría en un evento, fue cuando supe que estaba con mis amigos, con Hikaro. Nos sorprendimos, porque el mundo es tan pequeño y coincidir entre tanta gente es maravilloso. Saber que nos conoceríamos en persona me hacía muy feliz.


Finalmente el sábado 5 de julio de 2008 también conocería a otra persona –esta historia es algo graciosa– un chico que también es guitarrista su sobrenombre era "Degait Davor”, tocaba en Abigor... que curiosamente también nos conocimos a través de MySpace.

Llegó el día, el evento lo realizaron para festejar el cumpleaños de uno de sus integrantes, Ángel Doncel, el tecladista de la banda. Quien cumplía 18 años, era el integrante más pequeño de la banda y sólo me llevaba un mes de edad. Desde que nos vimos (Ángel y yo) supimos que seríamos grandes amigos.

Cuando llegué a la casa de Ángel (tecladista) y Eduardo (guitarrista de Hikaro) estaba algo nerviosa, conocer a dos personas con las cuales platicas por horas en MySpace no es lo mismo que mantener una platica común y corriente en persona… –aunque ahora a través de ciertas aplicaciones pareciera que es más fácil, aún así, sigo pensando que es algo arriesgado conocer gente por internet–.

No recuerdo a cuál de los dos vi primero, tengo algunas lagunas mentales y eso que no bebía alcohol –uno de mis problemas es olvidar detalles importantes o bloquear sucesos–. Sólo sé que cuando vi a Degait Davor le sonreí y además no me reconoció del todo –también le pasó a Draken–, porque mi hermana y yo nos parecemos al grado de que pensaban –piensan– que somos gemelas.

Recuerdo que quien platicó más conmigo fue Degait, sentí una sensación de confianza y tranquilidad. Draken no platicó mucho conmigo, después me dijo que al principio no sabía cuál de las dos era Mónica. Y sólo hasta que yo me animé a saludarlo supo que yo era la chica a través de MySpace y Messenger que pasaba el tiempo platicando con él.

Fue una linda noche festejando al “Crepas” y escuchando música, viendo tocar a mis amigos, pese a la lluvia y el frío. Conocer a dos personas que después serían parte importante de mi vida. 
Mientras escribo esto, estoy recordando que hace unas semanas, en estés últimos días del 2017 me encontré con Degait Davor –su nombre es David– no nos volvimos a ver hasta un concierto de Angra en el 2013. Nos pareció increíble la forma como el destino se encarga de volvernos a juntar y rememorar viejas amistades.

Ahora a unas horas de que acabe el año, puedo decir con mayor tranquilidad que estoy aprendiendo a amar, dejar ir y ser fuerte ante un mundo tan asqueroso –maldito capitalismo de mierda– 😓

Draken mi buen amigo necesita descansar porque así lo quiso, pero siempre será recordado por sus seres que realmente lo apreciaron, lo amaron y se lo demostraron hasta con una sonrisa, un abrazo, un apretón de manos.

Hace poco también, Joel el que fue bajista de la banda me dijo que aún le parece irreal que Draken ya no esté, que él a veces escucha su voz, su risa. Y no lo niego, a veces cuando la tristeza me alcanza corro a sus fotografías en Facebook, veo algunos vídeos que tengo cuando estaba en la banda, escucho a Dark Moor porque él me hizo conocerlos, porque sus canciones me hacen sentirlo cerca. 
Pero lo que más hice al cerrar el año fue cantar, bailar y beber, porque él era fiesta y diversión, algunas veces también fue bromas pesadas... Porque amaba la cerveza, el vodka y el vino tino y también el pulque (o eso fue cuando lo conocí, seguro cambiaron sus gustos…)

He aprendido en menos de un mes lo que es amar a los míos, y demostrarles lo importante que son para mi.

Te amo hasta la eternidad mi gran amigo y compañero Draken Hell.



P.D. Feliz año nuevo… 

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