Regresaste para darme una lección


Te volví a soñar, a 21 días después de mi primer sueño. No creo en las coincidencias, no creo que debas querer darme una señal. Estoy segura que, es mi mente la cual no me deja estar tranquila... aún. Sumado a eso, ayer estaba muy enferma y probablemente con temperatura. Todo tiene sentido ahora.

Aunque mi sueño no estuvo tan irreal. Apareciste como una casualidad cualquiera en mi casa, en la cocina con mi familia, todos hablando; hasta parecía una reunión tranquila antes de comer.

En eso me percaté que alguien platicaba con mi hermana, reían y yo no me había dado cuenta que estabas ahí. Sentí celos, supongo porque no me saludaste. (Tal vez es un reclamo jaja) 

Pasó algo abrumador, algo extraño, no te decían Draken como todos en mi familia solían llamarte. Te decían “Luis” y a mi me pareció extraño, porque en mi sueño yo sabía que ese no era tu “nombre” real. 

Tu sólo me mirabas (como queriendo hablar con tus ojos sin decir nada, como si fuera un secreto, un juego que sólo nosotros sabíamos) y decías: Ahora dime "Luis".

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