Hace un año, escribí "No me gustan las etiquetas" como una forma de cerrar ciclos, de definir ideas y dejar en paz algunos temas que han revoloteado en mi. Este año el tema claramente es Covid-19, -un aplauso por favor-, dentro de este tema tan sonado en toda la internet se derivan muchísimos otros. Como las diversas enfermedades mentales que aumentaron (ansiedad y depresión por ser las más comunes) algunas se agudizaron y otras se generaron tras el encierro, mucha más gente requirió y aceptó necesitar psicólogas/gos para enfrentar la realidad, para superar los duelos, aumentó la violencia hacia la mujer dentro de los hogares ya que muchas de ellas tuvieron que convivir con sus violentadores, ni hablar del aumentos de los casos de feminicidios...
Podríamos continuar la lista con muchas más temáticas catastróficas. Sin embargo la finalidad de mi escrito no es deprimirlos más de lo que seguramente ya están. A cada una de ustedes, que padecieron, sufrieron o aún continúan dando pasos pequeños para salir de ese caos de procesos mentales, les aplaudo, les abrazo y les digo que son valientes, enfrentar una pandemia, un aislamiento y todo un cambio en nuestras cotidianidad realmente es extraordinario.
Podríamos enlistar cosas aplaudibles como los diferentes procesos de las mujeres por aceptar sus cuerpos, las diversas actividades que realizaron cada uno de ustedes al irse habituando a esta llamada "nueva normalidad" algunos sí pudieron reorganizar sus calendarios y fueron más disciplinados, seguro está, que hubo quienes aprovecharon para tomar cursos en línea, aprender a cocinar, a tejer, cuidar plantas, etc. Aquellas/llos que emocionalmente lograron vencer esas barreras del tedio, los desánimos y la depresión y algo más fuerte los impulsó a salir del agujero, a todas ellas, ellos; también les aplaudo.
Siempre digo que comenzaré el año con metas realizables, con ideas que puedan lograrse y sin presionarme. También llego a decir "ahora sí, este año será para demostrarme que sé dibujar, que soy buena ilustrando" (porque se supone eso estudié), que ahora sí me daré el tiempo para hacer lo que me gusta. No sé si este año sea el indicado, estoy muy insegura porque Covid-19 continua acechándome, acechándonos y tengo planes que cumplir los cuales postergué desde hace un año.
Sólo vengo a deciles que, el tiempo pasa, yo no le he dicho a mi crush que es mi crush porque siento que no vale la pena decirlo y cambiar nuestra dinámica de conviviencia, el tiempo sigue transcurriendo y dejé de practicar lettering, el reloj sigue avanzando y mis dibujos siguen sin ser entintados, ya pasó otro segundo más de mi vida y no he comenzado los guiones para realizar ese podcast que tanto añoro...
Hagan lo que ustedes deseen y a los tiempos que consideren, no se presionen, así como yo sigo postergando cosas pero voy avanzando muy lento, como un caracol a mi propio ritmo.
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