Hace un semana yo me encontraba en otras tierras, en otro lugar desconocido y mágico. Tuve la oportunidad de viajar a la Riviera Maya y conocer un poco de sus playas. Este viaje no lo había planeado, lo que sí deseaba era salir de la ciudad, de mi cotidianidad, del estrés por el trabajo, la familia y muchas otras cosas que tengo aún atoradas y están en proceso de ser analizadas, reflexionadas.
En este viaje pude ir a algunos lugares y ser valiente ya que casi siempre estuve sola, caminado a la orilla del mar, caminado entre las calles más concurridas y tratando de pasar desaparecida. Viaje a Tulum, conocí la ruinas mayas y también fui a conocer un parque de cenotes, un lugar mágico, hermoso y conectarme con la naturaleza, esto totalmente sola. La gente se sorprendía al momento de tener que responder a su pregunta ¿Para cuántas personas o vienes sola? Y claro yo medio tímida a veces pero algo sería decía, sí vengo sola.
Me da mucho miedo viajar totalmente sola, el hecho de tener que resolver situaciones que están fuera de mi control, se apoderaba una tremenda ansiedad, pero en realidad es uno de mis grandes sueños, salir de México e irme a descubrir el mundo. Tengo algunas limitantes desde no saber inglés hasta no tener el suficiente dinero para dejarlo todo e irme a la aventura, aquí en la ciudad me atan responsabilidades que aún no han concluido. Además lo que implica ir sola a algún lugar y más en México es como sepultar tu tumba, los feminicidios están a la vuelta de la esquina pero es más frustrante el hecho de saber que eso puede paralizarme, es horrible porque nosotras como mujeres pensamos tres veces antes de ir sola a cualquier lugar, los hombres no ellos viven bajo una burbuja de privilegios porque el patriarcado dentro de este mundo capitalista lo ha seguido permitiendo.
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